No soy sino las lágrimas que esperan dentro de ti
para salir alborotadas como una bestia de su cueva,
anoche encontré en mi bolsillo mojado un poema
y lo tendí frente a tus ojos para que lo leyeras,
en la cima del árbol está colgando un fruto
que se detiene de una rama asustado de la tierra,
no soy sino el beso que esperas que te dé en la madrugada
por eso sigo mi canto en un cuarto donde nadie me escuche,
lánguida eres porque no vuelas entre la espesura de tu sexo
y la codicia de mi libido te desespera un poco más que antes,
calla a los perros que tengo hambre y no quiero oír la radio
sube a mis manos y te mezo como en un columpio de ramas secas,
no soy sino el viento que roza tu cara como el agua que bebes
estas palabras han de quemarte algún día y no habrá bomberos,
entonces es cuando habrás de recordarme en silencio,
no soy sino es contigo parte de la parte que nunca vemos,
anoche encontré un poema mojado y las letras estaban ahogadas
por eso este poema está inconcluso... ven a mí que te espero.
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